Mientras que las comunidades Amish intentan permanecer según lo aislado del mundo secular como sea posible, la comercialización de su cultura ha venido ser una fuente de la renta importante para ellas. De los muebles, al alimento, a los edredones, la cultura Amish ha sentido bien a una institución comercial importante, que ha conducido a los cambios en sus interacciones con el mundo exterior.
Uno de los factores principales que conducen a la comercialización de la cultura Amish es el turismo. Cuando la mayoría de la gente piensa en “país Amish”, ella piensa en Lancaster, Pennsylvania. Lancaster se ha convertido en el centro del turismo Amish no sólo porque es la más vieja y en segundo lugar más grande comunidad Amish, pero también debido a su localización cercana a muchas ciudades metropolitanas. Apenas apagado de I-83, condado de Lancaster está bastante cercano para que los turistas tomen un viaje del día en país Amish para conseguir lejos del paso rápido de la ciudad.
El turismo ha efectuado a Amish de varias maneras. En algunos casos, era resentido, y mucha gente se movió lejos de las ciudades que se convertían en pesadamente poblados . Sin embargo, en la mayoría de los casos el turismo se parece ser beneficioso al Amish, trayendo grandes ventajas económicas. También se ha sugerido que las ayudas del turismo stengthen vida Amish porque disminuye el boquete cultural entre los Amish y el mundo exterior. Además, el interés público cada vez mayor en cultura Amish ha aumentado la condolencia para ellos, que alternadamente desalienta el gobierno de la infracción en las sus derechas.
A largo plazo sin embargo, la comercialización ha tenido poco efecto en la manera Amish de mirar el mundo. Todavía son verdad a su creencia básica, y sus comunidades de la iglesia todavía están creciendo. A pesar de la interacción creciente con el mundo exterior, los Amish han manejado mantener sus formas de vida simples.
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