Toda familia que quiera pasar unas vacaciones distintas e inolvidables debe visitar, en Millet, el lugar dónde vivirá nuevas experiencias realmente sorprendentes, fantasmagóricas y alucinantes, la Exoalquería.
Limoneros, magnolias, palmeras, higueras, plataneros, tulipanes, naranjos, cactus y todo lo inimaginable, sin olvidarnos de sus magníficos habitantes: los animales, serán vuestra mejor compañía.
Las horas de la comida serán únicas, ya que tendréis unas invitadas excepcionales y charlatanas, que os harán la comida mucho más amena. Ellas son las adorables abejas, vestidas de carnaval y con sus arrugadas alas.
Pero lo verdaderamente emocionante llega con el hechizado anochecer. De entre la penumbra aparecen mujercitas preparadas para asistir a la mejor de las fiestas: la matanza de cucarachas. Se colocan sus mejores trajes: de tonos rojizos, sucios, malolientes y repugnantes, para pasárselo en grande. Ya que a todas ellas les llegará el día del triunfo: morir habiendo causado espanto a algún miembro de la familia alojada. Pero eso no es todo, a partir de la media noche tiene lugar la gran carrera. Rápidas como el viento e inesperadas, corretean por toda la casa metiéndose por todas partes, en el lavabo, en la bañera, debajo de las camas…hasta alcanzar la meta: la nevera, llena de deliciosos premios.
Pero tranquilos, si a uno le aburren las carreras de cucarachas, después de cenar puede degustar, como postre, de las grandes risas que jamás uno haya imaginado. Los brazos de los grandiosos árboles –chopos, nispereros, entre otros– empezarán a temblar y las hojas enloquecerán como si de cosquillas se trataran. Y es que las vecinas, las ratas, de miradas diabólicas, de cuerpo poco definido y de sonrisa austera, tienen como hobbie salir de noche a tomar la risa de los tímidos árboles.
Por otro lado, la sala de fiestas siguiente, que tendrá lugar en el porche de la Exoalquería, será una danza que cuenta con largos años de historia, considerada patrimonio de Millet, y que sus ensayos se llevan a cabo cada noche a partir de la una de la madrugada. Esta es la danza de los dragones. Ellos actúan siempre bajo el lema Baila, baila, con nosotros, así que preparaos para bailar.
En definitiva, realmente, la vida y la felicidad en Expoalquería se hallan en la noche, convirtiendo a esta en mágica.
Y no es para menos, hasta en los dulces sueños la compañía está asegurada. Con bonitos tatuajes despertarás, con el copy-right de Mosquitos S.A. Y este despertar no es más que un radiante amanecer con la magnífica orquestra sinfónica de fondo: tenores grillos y sopranos cigarras. Combinación perfecta para un buen desayuno sin que le falte el toque salado de la carretera general.
Por lo tanto, Expoalquería, ideal en fauna y en flora, también lo es en vistas perfectas, para una familia perfecta, como la vuestra.
Dèbora Segura i Renau
Certamen Literari 2008 - Llor
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